Me despierto inquieta, no se porque. Me doy cuenta de que es el teléfono el culpable, pero lo ignoro, no pienso levantarme. Cortan. A los 2 minutos vuelven a llamar. Atiendo sin disimular mi tono de fastidio.
-Hola Martu, soy yo, está tu papá?
- Supongo que no. (si estuviera seguramente hubiese atendido para que yo no me despertara)
-Ah bueno, lo llamo después.
-Bueno, chau. Corto.
Estamos en un camping. Es de noche, pero nos comportamos como si fuera de día. Hay una mesa larga, me siento con Lai al lado y las chicas en frente. Aparece él y se sienta en la esquina. De la nada se pone a hablar con nosotras, re buena onda. Alguien nos dice que, quien quiera ir a meterse al lago vaya ahora. Y yo quiero, pero quiero quedarme charlando con el también. Lo retraso un poco, pero tengo que ir al lago, es algo que si o si tengo que hacer. Así que voy con Lai. Nos metemos al lago, que tiene rejas alrededor. Hay plantas y posiblemente bichos, el agua debe estar fría pero no la siento y me sumerjo. Se pueden ver a los chicos en la mesa desde donde estoy. Me agarran ganas de salir. Ya cumplí, así que me voy. No se bien que pasa. Agarro una toalla, entro a un shopping, una mujer no me deja salir, la conozco pero no me acuerdo de su nombre. Quiere que haga algo, pero yo quiero volver al camping. Aparezco ahí. Y está el con su amigo hablando medio a los gritos. Están muy locos los dos. Son raros.
Me despierto inquieta otra vez. El timbre. Me levanto y me asomo por la ventana que da a la calle. Es el sodero. Agarro un vestido que tengo sobre la silla del escritorio y me lo pongo encima, pero cuando bajo, el sodero ya no está.
Y escribiendo me doy cuenta de que no era de noche, estaba soñando en blanco y negro. Nunca me había pasado.
ay que lindooo!! me fascinoo.. <3
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